Si te gustan los postres ricos y cremosos, querrás probar este clásico atemporal: la tarta de queso casera. Puedes apostar a que esta receta, preparada con amor y cuidado, se convertirá en la favorita de la familia durante muchas generaciones.
La gran noticia es que hacer una tarta de queso tradicional no es tan complicado como puedas pensar. Sigue leyendo para obtener una guía paso a paso de una de las mejores tartas de queso que hayas probado jamás.
Ingredientes de la mejor tarta de queso tradicional
Migas de galleta Graham: Uno de los elementos básicos de cualquier corteza de tarta de queso de confianza son las migas de galleta Graham; opta por una versión comprada en la tienda o hazla tú mismo.
Mantequilla: La mantequilla sin sal es la mejor para la masa. Mantiene bien unidas las galletas y realza su sabor.
Queso fresco: Elige una marca con toda la grasa para conseguir la tarta de queso más cremosa. La elección clásica sería Philadelphia.
Azúcar: El azúcar glas suele ser la mejor opción para la tarta de queso. Para divertirte un poco, puedes optar también por un azúcar moreno claro.
Zumo de limón: Un sabor cálido y picante que une todos los sabores de la tarta de queso.
Extracto de vainilla: Una cucharadita de este aromático líquido es el toque final perfecto para una suntuosa tarta de queso.
Huevos: Bátelos a la perfección e incorpóralos al relleno hasta obtener una consistencia suave y deliciosa.
Instrucciones para hacer la mejor tarta de queso tradicional
Prepara y precalienta el horno
Antes de empezar con el proceso de elaboración de la tarta de queso, asegúrate de que el horno está precalentado a 325 grados Fahrenheit.
Prepara la corteza
Mezcla las migas de galleta graham y la mantequilla derretida hasta que mantenga su forma al apretarlas. Pasa la mezcla a un molde desmontable de 9 pulgadas, presiona ligeramente hacia abajo y hacia arriba por los lados para darle la forma deseada.
Prepara el relleno
En el cuenco de una batidora eléctrica, mezcla el queso crema, el azúcar, el zumo de limón y el extracto de vainilla hasta obtener una mezcla homogénea. Añade los huevos batidos y mezcla hasta que se integren.
Hornea la tarta de queso
Vierte la mezcla de la tarta de queso en la base preparada. Coloca el molde en una bandeja con borde y mételo en el horno. Hornea durante 55-65 minutos o hasta que la superficie esté ligeramente dorada y ligeramente firme al agitar suavemente el molde.
Enfriar y guardar
Después de hornear, saca la tarta de queso del horno. Deja que se enfríe a temperatura ambiente en el molde y, a continuación, pásala al frigorífico. Déjala enfriar durante al menos seis horas o hasta toda la noche para que adquiera el mejor sabor y textura.
Servir la tarta de queso
Cuando vayas a servirla, utiliza un cuchillo caliente para despegar los bordes de la tarta de queso del molde. Retira las paredes del molde y corta la tarta de queso en porciones. Para darle un toque especial, rocía las porciones de tarta de queso con salsa de chocolate, o cúbrelas con bayas frescas.
Pensamientos finales
Una tarta de queso casera es la máxima expresión de amor y cuidado en la cocina. Tanto si se comparte con los amigos, la familia o se sirve en una ocasión especial, no hay nada como un trozo de tarta de queso perfectamente hecha. Siguiendo esta guía paso a paso, puedes estar segura de que tendrás lista en un santiamén una tarta de queso deslumbrantemente deliciosa.